Aún no pedí turno para la histerosalpingografía y cometí el TERRIBLE error de buscar en internet de que trataba la cosa.
Estoy tomando la levotiroxina a lo que le agregué, gracias a múltiples lecturas, ácido fólico de 5mg.
Me levanto todas las mañanas a hacer ejercicio, porque aunque los médicos no hayan dicho nada respecto al peso, SE que necesito perder unos (cuantos) kilos para llevar adelante un embarazo saludable.
Mis amigas están revolucionadas. Seguro se debe a que en el fondo, ellas no me creían cuando hablaba de esto siendo más chicas.
Mis abuelas fueron mucho más abiertas de lo que yo esperaba. La tienen re clara y le comentan el procedimeinto a todo aquel que quiera saber.
Mis viejos estan más entuciasmados que yo; mi mamá teje una manta para que pueda jugar en el piso cuando tenga edad y mi papá llorisquea cada vez que hablamos del tema.
Mis hermanos no muestran emoción alguna, cosa que me resulta raro (y algo preocupante) viniendo del más chico (22) porque él siempre hablaba de lo mucho que le gustaría tener un sobrino.
Mi prima imagina todo de a dos desde el día que en la ecografía se vieron dos óvulos en vez de uno. Yo me vuelvo loca con la idea!

Segunda consulta

02 de Septiembre 2015.

Llegué tarde culpa de un embotellamiento en la 9 de Julio.

Me estaban esperando. $600 la consulta.

La doctora Raso es mucho más joven de lo que me imaginaba. Nos hizo pasar a su consultorio (nuevamente fui acompañada de mis viejos) y comenzamos una charla casi de amigos. Me preguntó por qué optaba por la inseminación a lo que mi respuesta fue clara, ya que es la misma que le doy a todo el mundo: "Quiero ser mamá y no quiero esperar más".

Miró mis estudios y me solicitó una histerosalpingografía, misma que aún no me hice porque hay que pedir el turno el primer dia del período y yo me pasé. La dejo para octubre.

Durante la consulta me explicó nuevamente el procedimiento y me recetó levotiroxina ya que, según lo que dijo, si bien para una persona normal mis niveles son (valga la redundancia) normales, para alguien que busca un bebé necesitaba mejorarlos. Me explicó sobre unas inyecciones que me voy a tener que colocar tres dias antes del procedimiento y al hablar del banco de esperma que elegiría me recomendó uno con el que - por suerte! - conseguí turno ese mismo día.

A 'Reprobank' (http://repro-bank.com/) se dirigió la mini comitiva.

Nos atendieron muy bien, de forma muy amable. Perdón que repita esto de la amabilidad, pero en mi ciudad los médicos suelen creerse eminencias y tratan con bastante desprecio a los pacientes.

$250 la consulta informativa.

Ya había leído sobre la donación de esperma por lo que no tenía muchas dudas. Me dieron los formularios a llenar y me explicaron sobre los valores y las formas de pago.

Este banco en particular, tiene u programa d eidentidad abierta, es decir que si mi hijo al cumplir 18 años quisiera saber quien fue el donante, hay un registro que se lo permitiría saber. No fue lo que yo elegí. Me pidieron estudio de grupo y factor sanguineo para que el donante sea compatible conmigo.

Acá quiero desmitificar o mejor dicho, 'deshollywoodizar' como es la elección de un donante.

Una de las planillas que me dieron es la de datos personales, en donde debo completar no solo mi nombre y demás datos biométricos sino tambien mis características físicas (si soy morocha o rubia; si tengo el pelo lacio u ondulado; cuanto mido; cuanto peso; el color de mis ojos; etc) y todo esto para que el donante que ELLOS te buscan sea lo más compatible con una. Nada de revisar un 'catalogo' ni nada de eso.

Los valores de las muestras son bastante más accesibles de lo que había hablado con otras chicas en mi misma situación. Además te hacen un descuento si compras tres muestras, que es lo que yo voy a hacer, no por negativa, sino porque cuando quiera otro hijo voy a querer que sean 100% compatibles.

Primera consulta

La misma fue el día 12 de agosto con el Dr. Guillermo Marconi.

De mi ciudad a Capital hay aproximadamente 280 Km, por lo que bien tempranito marché al destino acompañada (como siempre) de mis viejos que iban casi más emocionados que yo.

El lugar es una belleza, todo muy limpio y las chicas de la entrada son muy amables. Antes que nada me cobraron los $600 de la consulta. Me tomaron los datos, una foto y me dieron unas planillas para completar de puño y letra. Esperé en la planta baja por aproximadamente veinte minutos y luego me hicieron subir al segundo piso en donde esperé una hora de reloj.

No tengo palabras para expresar lo bien que me sentí durante la consulta. El Dr. Marconi hizo pasar a mis padres y junto con otra doctora, cuyo nombre no recuerdo, me explicaron todos los pasos a seguir.

Algo que me asustaba a la hora de la consulta era el asunto del peso. Tanto mi mamá como mi ginecóloga me habían dicho que debería bajar de peso, pero este tema ni se tocó en los cuarenta minutos de charla con el médico. Había llevado mis últimos estudios ginecológicos (pap; ecografía TV; ecografía mamaria) y con eso 'acortamos' mucho el tiempo de espera. Además me pidió muchos analisis de sangre. Los mismos fueron cubiertos en su totalidad por mi obra social. De no haber sido así, saqué la cuenta y me hubieran costado más de 6mil pesos.

En la consulta el doctor me explicó los distintos procedimientos y dado que según él estoy en "óptimas condiciones medicas" optamos por la Inseminación Artificial Intrauterina con semen de donante, por eso me derivaron con la doctora Doris Raso que es la encargada del área 'donación' con quien tuve la segunda consulta.

Ya visualizando los temibles 30 me animé a realizar mi sueño más grande. Ser mamá.
Desde muy chica decía que si para esta edad no tenía una pareja estable, iba a acudir a la inseminación artificial. Claro, decir eso hace quince años era una locura y como tal todos se la tomaban.
Pero en marzo de este año (2015) hablé con mis más fieles seguidores (llámese mamá y papá) e inicié el 'proyecto'.
Lo primero fue informarme sobre los institutos que realizan el procedimiento en Buenos Aires. Vivo más cerca de Rosario, pero los centros de esa ciudad exigían estar casada o al menos en pareja.
Tengo una muy buena obra social por lo que asumí que después de la ley todo me sería más fácil. NUNCA estuve tan equivocada en mi vida!!!
Es cierto lo que dicen "hecha la Ley, hecha la trampa". Según la Ley Nº 26.862 de 'Acceso integral a los procedimientos y técnicas médico-asistenciales de reproducción médicamente asistida': 
-Tienen derecho a las prestaciones de reproducción médicamente asistida todas las personas, mayores de edad, sin discriminación o exclusión de acuerdo a su orientación sexual o estado civil.

- El sector público de la salud, las obras sociales reguladas y otras entidades de la seguridad social incorporarán como prestaciones obligatorias y a brindar a sus afiliados o beneficiarios, la cobertura integral de las técnicas de reproducción médicamente asistida.

Pero resulta que mi obra social solo tiene acuerdo con UN lugar de todos los que realizan el procedimiento y da la casualidad de ese lugar no trabaja con mujeres solteras.

Así que empecé a averiguar por otros lados y terminé en IVI. (http://www.ivi-fertilidad.com)

Lo primero que hice fue llenar un formulario que está en la pagina web solicitando información y al día siguiente se comunicaron conmigo por vía telefónica. La persona con la que hablé fue extremadamente amable y comprensiva con mi situación. Después de dar algunos datos concretamos fecha para la primerisima consulta.